Existen destinos que enamoran a primera vista y se quedan para siempre en un rincón del corazón. Prepárate para sentir varios flechazos cuando descubras los 5 destinos de los que te vamos a hablar a continuación.
Cupido, calienta que sales. 💘
El sueño máximo de todo amante de la naturaleza es viajar a las Islas Galápagos (Ecuador). Y qué mejor manera de conocer este increíble destino que a bordo de un crucero naturalista en el que irás acompañado por expertos biólogos.
Te espera un recorrido apasionante por un santuario ecológico único donde podrás observar iguanas marinas y tortugas gigantes, contemplar cactus enormes y, entre muchas otras actividades, pasear por islas volcánicas en las que habitan innumerables especies endémicas y nativas.
En las Galápagos es imposible aburrirse. Si eres un viajero atrevido, te sugerimos bucear entre tiburones martillo en la Isla Seymour Norte o en el Islote de Mosquera. También te gustará navegar en kayak por los alrededores de Tortuga Bay (el lugar más bonito de la Isla de Santa Cruz) para avistar las preciosas y coloridas aves que sobrevuelan la costa. Si prefieres hacer esnórquel, desplázate a la Isla Pinzón y podrás ver lobos marinos, estrellas de mar y un sinfín de peces.
En la Isla de San Cristóbal hay una colina llamada Cerro Tijeretas que cuenta con miradores desde los que se tienen unas vistas sensacionales. Otro punto igual de especial que el anterior, pero ubicado en las afueras de San Cristóbal, es “el León Dormido”, unas formaciones rocosas que sobresalen del agua y que destacan por su gran biodiversidad.
Hacer un safari acuático es una magnífica oportunidad para adentrarse en este fascinante archipiélago, el mismo que inspiró a Charles Darwin para elaborar su reconocida teoría de la evolución.
Remotas y aisladas, las Islas Marquesas se alzan sobre el mar entre la Isla de Pascua y Hawái. Aunque no sean de las más visitadas por los turistas, son parte importante de la Polinesia Francesa porque cuentan con multitud de atractivos naturales.
Lo primero que te llamará la atención de estas islas son sus costas. Estas están completamente expuestas al Océano Pacífico, por lo que no es de extrañar que el paisaje que hay sea escarpado y esté lleno de acantilados, bahías y playas de arena negra.
Bebido a su origen volcánico y a diferencia de Bora Bora, las Islas Marquesas no poseen arrecife de coral. Sin embargo, son el único emplazamiento de la Polinesia Francesa donde se conserva la cultura ancestral, a pesar de los años.
De las doce islas que conforman este archipiélago, solo 6 están habitadas: Nuku Hiva, Ua Pou, Ua Huka, Hiva Oa, Fatu Hiva y Tahuata.
Nuku Hiva, la isla más grande de las Marquesas, posee una buena cantidad de yacimientos arqueológicos. Su configuración geográfica ilustra a la perfección el significado de su nombre, “la larga cresta”. Aquí encontrarás los famosos tikis (estatuas talladas que representan la imagen de ciertos dioses) y la Cascada Vaipo (ubicada en el valle de Hakaui), la más alta de la Polinesia. Podrás perderte por acantilados solitarios y bahías que fueron, en el pasado, el cráter de un volcán. Además, tendrás la oportunidad de asistir a un baile “haka”, una danza intimidante heredada por los maoríes.
No te vayas sin visitar Ua Pou. Sus paisajes son verdaderamente excepcionales. Uno de los enclaves más bellos es, sin duda, el Valle de los Reyes. Si te gusta caminar, vas a disfrutar mucho realizando una ruta de trekking. Y si lo que te apetece es navegar, te damos una idea: hacer una excursión en barco para deleitarte con el misterioso perfil de la isla.
Si buscas tener una experiencia lo más pura posible, en las Islas Marquesas lo vas a conseguir.
No exageramos si te decimos que las Islas Cook son sencillamente asombrosas, sobre todo, Aitutaki.
El clima de este atolón de forma triangular, sus playas de película y la sensación de estar en el paraíso te van a dejar marcado sí o sí.
Aitutaki es un anillo de tierra en cuyo centro se encuentra la laguna de coral más espectacular del Pacífico. Aunque la laguna parece muy honda, en realidad no lo es. ¡Se puede andar sobre ella! De hecho, es un espacio ideal para practicar deportes acuáticos como el buceo o el esnórquel y observar infinidad de peces tropicales.
En Aitutaki también se pueden hacer caminatas y ascender al Maunga Pu, el punto más elevado de la isla. Si subes, confirmarás con tus propios ojos que las vistas son sorprendentes.
El mercado de los sábados que se organiza en el muelle de Arutanga es estupendo para acercarte a los lugareños y comprar tanto fruta fresca como productos de artesanía.
Los habitantes de las Islas Cook son famosos por sus bailes tipo hula-hula. Es por ello que, si quieres conocer un poco más su cultura, te proponemos desplazarte al pueblo de Vaipaee y dejarte seducir por las danzas con fuego que se realizan al ritmo de los tambores.
Prepárate para caer rendido en uno de esos destinos que enamoran ante Luang Prabang (Laos), la ciudad más bella del Sudeste Asiático.
Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1995, se ha convertido en uno de los sitios favoritos de viajeros de todo el mundo por la paz y la espiritualidad que transmite.
Estamos ante la tercera ciudad más poblada después de la capital (Vientián), que es, a su vez, el principal centro religioso y turístico del país, puesto que cuenta con numerosos de templos activos.
En Luang Prabang te recomendamos hacer dos excursiones que no te defraudarán. La primera te llevará a las Cataratas Kuang Si, un lugar donde se han formado unas impresionantes cascadas de tres niveles en un entorno de belleza sin igual. La segunda salida consiste en ir a las cuevas de Pak Ou, cuyo interior está repleto de pequeñas estatuas de Buda dejadas por los peregrinos.
Otra actividad que te encantará es pasar un día y una noche cerca del río Mekong en un pueblecito de pescadores y alojarte en Kamu Logde, un campamento ecológico privado. Además de interactuar con la gente local, aquí podrás disfrutar de un paisaje repleto de plantaciones de arroz, de montañas y de una espesa vegetación.
En el casco antiguo de la ciudad te toparás con mercadillos y establecimientos para hacer todo tipo de compras y con una zona cercana al río Mekong con terrazas para relajarte tomando algo mientras ves caer el sol.
En definitiva, esta es una aventura cautivadora y muy completa que combina algunos de los mejores elementos que se hallan en esta zona de Asia.
Una de las regiones del mundo en la que te puedes quedar totalmente embelesado nada más poner un pie en ella es el desierto de Atacama, Chile.
En este desierto, el más antiguo, seco y alto de Sudamérica, te vas a sentir como en otro planeta al contemplar sus panorámicas y sus llamativos colores, casi extraterrestres.
A tan solo 13 kilómetros de San Pedro de Atacama se halla el Valle de la Luna, uno de los mayores atractivos del desierto chileno. Cuando veas los paisajes lunares de esta depresión, podrás comprobar que su nombre no hace referencia a la Luna por casualidad. Dada la magnitud de este valle, te recomendamos mucho dar un paseo en globo para verlo desde las alturas.
A lo lejos divisarás volcanes y la ondulada Cordillera de la Sal, una de las joyas naturales del desierto de Atacama que merece la pena ser visitada al amanecer o al atardecer. Se trata de una cadena montañosa que se extiende por un terreno de suelos salados y totalmente áridos.
Un paraje de visita obligada es el Valle del Arcoíris, el cual se caracteriza por la inmensa variedad cromática de sus cerros y por la gran diversidad de minerales y rocas que alberga. Tampoco te pierdas el espectáculo de color que ofrecen las Lagunas Escondidas de Baltinache. Son un conjunto de siete pequeños lagos que despertarán tu admiración por el intenso tono turquesa de sus aguas saladas.
Si te gusta la astronomía, estás en el sitio perfecto para disfrutar de las estrellas, ya que esta localización es fantástica para su observación. Su clima seco, la altitud de la zona, la ausencia de lluvias y nubes y la escasa contaminación lumínica te permitirán apreciar las maravillas del universo durante un tour astronómico que nunca olvidarás.
Estamos seguros de que alguno de estos destinos ya te está haciendo sentir mariposas. Llámanos al 93 209 19 00 y te diseñaremos un viaje a medida para que caigas completamente rendido a sus encantos.
En Andrómeda Viajes te ofrecemos experiencia, conocimiento, dedicación y exclusividad.
Creamos momentos, actividades y sensaciones únicas que serán difíciles de olvidar. Nuestros equipos formados por los mejores profesionales del sector harán que todos los viajeros vivan experiencias inolvidables, personalizando cada viaje y ajustándolo a sus necesidades y deseos. Hacemos posible lo imposible diseñando cada momento con delicadeza y cuidando cada detalle para que sea perfecto.
© Viajes Andrómeda SA, 2020 | Aviso Legal | Política de Privacidad | Política de Cookies | Ética y Responsabilidad | Canal de Información interno
Suscríbete ahora y accede a experiencias únicas, destinos de ensueño y ofertas exclusivas diseñadas sólo para viajeros como tú