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Hoy queremos hablarte de Vietnam, un país exótico y cautivador que tiene mucho que ofrecer. Sigue leyendo para descubrir todos sus encantos.
Vietnam es uno de los destinos más visitados del sudeste asiático y, la verdad, es que motivos no le faltan. Aquí encontrarás terrazas de arroz de un verde intenso, ciudades con mucha historia, islas, mercados flotantes, numerosos templos, una deliciosa gastronomía y mucho más.
Te proponemos visitarlo recorriéndolo (al contrario de como lo hace mucha gente) de sur a norte, en un viaje donde la experiencia irá, poco a poco, “in crescendo”: comenzando por los sitios más bulliciosos y acabando en lugares donde reina la calma.
En el sur de Vietnam te espera Ho Chi Minh, la ciudad más grande y poblada de la nación. Tendrás la oportunidad de empaparte del auténtico ambiente vietnamita y de apreciar el ajetreo y el bullicio de sus calles.
Ho Chi Minh cuenta con museos, con numerosos mercados (entre los que destaca el Mercado Ben Thanh) y con edificios de arquitectura colonial como, por ejemplo, la Basílica de Notre-Dame de Saigón o la Oficina Central de Correos.
A continuación, te dirigirás por carretera al delta del Mekong, donde pasarás la noche. Te proponemos alojarte en un barco de uno o dos camarotes y personal a tu servicio para hacerte la estancia más agradable. Podrás navegar por los mercados flotantes de Phong Dien y Cai Rang y ver cómo los lugareños comercian sobre sus barcas.
Este particular alojamiento flotante lleva una sencilla embarcación tradicional adicional para que te adentres, junto a tu guía, en los canales más estrechos como si fueras un local. También dispone de bicicletas para que pasees por los pueblos rurales y los arrozales mientras disfrutas de la verdadera esencia del delta del Mekong.
Continuarás tu aventura asiática volando hasta Da Nang (en el centro de Vietnam) para llegar a dos poblaciones muy próximas entre sí.
La primera es Hoi An, una pequeña ciudad costera que posee un precioso y bien conservado casco antiguo en el que hay rincones que te brindarán gratas sorpresas. Si por algo es conocida esta ciudad es por los cientos de farolillos que la engalanan y que le aportan color durante el día y un aire mágico por la noche.
La segunda población que visitarás es Hué, la antigua ciudad imperial de Vietnam. Es toda una joya que recuerda a la ciudad prohibida de Pekín y en cuyo recinto encontrarás palacios y pabellones de la dinastía Nguyen. Asimismo, podrás contemplar bellos templos como Thien Mu y enormes mercados como Dong Ba.
Seguidamente, te trasladarás en avión a Hanoi, el plato fuerte de este viaje que se halla en la zona norte.
La capital se caracteriza por su ambiente animado, por el gentío incesante y por los vehículos que se mueven, como un enjambre, de un lado para otro. No olvides que la mejor manera de ver algunos de los lugares más emblemáticos de la ciudad es yendo en tuk-tuk, un pintoresco motocarro de tres ruedas que te garantiza una experiencia muy divertida.
Un sitio imprescindible que ver en Hanoi es el lago Hoan Kiem, el lugar escogido tanto por turistas como por locales para conseguir algo de paz en una de las ciudades más caóticas del Sudeste Asiático.
Visita, justo al lado del mausoleo de Ho Chi Minh, el Palacio Presidencial. Podrás acercarte al exterior del edificio y acceder a sus jardines para hacer unas fotos. No muy lejos de allí se encuentra la curiosa Pagoda del Pilar Único que, como bien dice su nombre, está formada por un único pilar.
Bac Ha es una población en la que se celebra uno de los mercados más bonitos y coloridos de esta región y donde acuden a vender sus productos artesanos las etnias que habitan en las montañas de Sapa. En este hermoso paraje también descubrirás las inmensas terrazas de arroz, un verdadero espectáculo visual que, desde ese momento, siempre recordarás.
A menos de dos kilómetros del centro de Bac Ha se sitúa el valle de Thai Giang Pho. Merece la pena desplazarse hasta este enclave para disfrutar de los aromas y los colores de las flores que abundan en él.
Finalizarás tu periplo haciendo una excursión fabulosa. Consiste en realizar un pequeño crucero por la bahía de Halong, un impresionante trayecto en el que apreciarás las numerosas islas e islotes que conforman el espléndido paisaje marítimo, así como genuinos y tranquilos pueblos flotantes. No olvides que, durante el itinerario, es posible hacer actividades tan interesantes como la de visitar la cueva de Sung Sot, la cual está llena de grutas y estalactitas distribuidas en tres salas.
Si lo que has leído te ha gustado, imagínate la experiencia tan increíble que sería pasar unos días en Vietnam. Llámanos al 93 209 19 00 y adaptaremos este viaje a tus gustos y necesidades.
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