5 lugares curiosos de Turquía

Este artículo fue publicado el 04/05/2022

Turquía es una tierra llena de contrastes que cuenta con una cultura única, una historia muy interesante y unos rincones tan exóticos como mágicos. 

Hoy queremos hablarte de 5 lugares curiosos de Turquía que siempre consiguen dejar a los visitantes con la boca abierta cuando hacen un viaje a medida a este país. 

Capadocia

La Capadocia es una región situada en el centro de Turquía, cuyo paisaje casi lunar te dejará sin palabras.

Verás numerosas formaciones rocosas conocidas como “chimeneas de hadas”, las cuales se han ido formando durante muchísimos años a causa de la erosión. Aparte de esta alucinante zona, también podrás ver casas excavadas en la roca.

Una actividad muy solicitada por los turistas y que nosotros consideramos esencial es ir al Museo al Aire Libre de Göreme. Además de otras atracciones, aquí te esperan iglesias rupestres con bellos frescos antiguos.

No te vayas sin hacer una excursión por el Valle de las Palomas, sin subir al Valle de Devrent, sin admirar el Castillo de Uchisar y el de Ortahisar y, sobre todo, sin entrar en alguna ciudad subterránea como, por ejemplo, Derinkuyu y Kaymakli.

Uno de los momentos más memorables de tu viaje a medida a lugares curiosos de Turquía, puede ser el de sobrevolar la Capadocia en globo al amanecer. Tendrás unas vistas privilegiadas del paisaje iluminado por los primeros los rayos del sol del día.

Monte Nemrut

Al sureste de Turquía y a más de 2.000 metros de altura se encuentra el Monte Nermut, un punto imprescindible del país que todo viajero debe conocer. 

La popularidad de este monte se debe a las cabezas gigantes que se conservan en su cima. Originariamente, medían alrededor de ocho y nueve metros de alto y representaban a los dioses sentados en tronos.

Dichas esculturas talladas en la roca fueron mandadas a construir, allá por el siglo I a. C., por orden del rey Antíoco, con el objetivo de crear su mausoleo en un lugar tan cercano a los dioses como fuera posible. Supuestamente, en el centro del complejo se hallaría la tumba del rey.

Lo más interesante de esta montaña es que desde lejos parece estar totalmente desierta. El motivo de que pase tan desapercibida es que el emperador mandó esconder su particular sepulcro con millones de rocas, formando una especie de corona que cubre el santuario.

Para ir a ver esta joya milenaria es preferible evitar el invierno. La primavera y el verano son las dos estaciones del año que ofrecen las condiciones climáticas más favorables para visitar este enclave.

Pamukkale

En la provincia de Denizli, a una hora en avión de Estambul, llegarás a uno de los más reconocidos lugares curiosos de Turquía. Se trata de Pamukkale, cuyo nombre traducido al castellano significa “castillo de algodón”.

Si tienes la oportunidad de contemplar este espectáculo de la naturaleza, podrás confirmar lo acertada que es su denominación, puesto que tendrás la sensación de estar viendo una montaña blanca y esponjosa.

En el pasado, la zona sufrió un buen número de terremotos. De las fallas brotó agua rica en minerales, bicarbonato y creta, un tipo de roca de la que se extrae la tiza. De ahí, el color blanquecino tan característico de este emplazamiento con aspecto de cascada congelada.

Te llamarán la atención las múltiples “piscinas” de aguas termales de color turquesa dispuestas en terrazas. Son una verdadera maravilla que fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad en el año 1988 junto con la antigua ciudad helenística de Hierápolis.

Éfeso

Si te apasiona la arqueología, te quedarás boquiabierto cuando vayas a la antigua ciudad de Éfeso, muy cerca de la costa del mar Egeo.

Fue fundada por los griegos y alcanzó su máximo esplendor durante la ocupación romana, época de la que aún se conservan grandes edificios y monumentos. 

Caminar por sus calzadas, salpicadas de columnas y rodeadas de antiguos templos, es como viajar en el tiempo. Te recomendamos visitar el Templo de Adriano, el Ágora, el Odeón, el Teatro, el antiguo Lupanar, los baños y las termas.

Entre todas estas construcciones, la Biblioteca de Celso destaca por su valor histórico y arquitectónico. Fue la tercera biblioteca más importante del mundo antiguo por detrás de Alejandría y Pérgamo y, según cuentan, llegó a albergar unos 12.000 libros.

Al pasear por Éfeso es fácil entender por qué esta ciudad fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2015. Constituye un inmenso legado en muy buen estado de conservación que pone ante nosotros la magnificencia del mundo clásico.

Tumbas Licias de Myra

Para terminar, hemos reservado una localización muy impactante situada al sur de Turquía, en las afueras de la actual Demre. 

Nos referiremos a las Tumbas Licia de Myra, unas necrópolis de estilo licio que son obra de un antiguo pueblo que habitaba esta región en la época del Imperio Romano.

Este conjunto de tumbas rupestres se divide en dos grupos, siendo el más famoso el que se distribuye en las paredes de una montaña cercana al río Demre Cay, llamada la Roca de Dalyan.

Hace unos años, los sepulcros fueron saqueados. Por este motivo, se decidió trasladar la mayoría de los altares y relieves al British Museum. Sin embargo, todavía es posible apreciar los pórticos y algún que otro relieve perteneciente a las tumbas de los gobernantes.

A raíz de los distintos trabajos de arqueología que se han efectuado en las Tumbas Licia de Myra, se han hecho hallazgos de lo más variopintos: desde botellas que se usaban para recoger lágrimas hasta instrumentos de sacrificios, pasando por joyas, oro e incluso frescos y grabados.

Como información adicional, te contamos que, aunque hoy las tumbas se mimetizan perfectamente con las rocas del acantilado, se sabe que estuvieron pintadas de diversos colores cuando se tallaron en el siglo IV a.C.

¿Qué te han parecido estos lugares curiosos de Turquía? Impresionantes, ¿verdad? Recuerda que en Turquía te esperan muchas más sorpresas que puedes descubrir de la mano de Andrómeda Viajes. Contacta con nosotros en el 93 209 19 00 y te diseñaremos un inolvidable viaje a medida a este destino.